
La gran triunfadora de la noche fue Alemania que se alzó con el triunfo tras una impacable actuación de Lena, la jóven de 19 años que complació a los espectadores con el tema "Satelitte". Con 246 puntos se adelantó a la primera posición seguida de Turquía y Rumanía que se rindieron ante el ritmo alemán, que sumaba su segundo triunfo después de 28 años sin obtener una victoria. La canción era buena para ser ganadora del festival pero tampoco es una obra maestra, buen ritmo para pasar el momento y con una cantante convincente y natural. Una muestra de que no siempre la puesta en escena es lo más importante sino la materia prima. La chica apareció con un vestido negro muy discreto y sola en el escenario en una actuación discreta pero animada con muy buena actitud y ganas de quedarse con los espectadores. Hacía mucho tiempo que uno del Big Four (España, Francia, Alemania, y Reino Unido) no ganaba y al fin Alemania ha roto esa racha llevando el festival a Berlín en 2011.
Está pasable, al menos este año se lo lleva uno del Big Four para callar algunas voces críticas.
Está pasable, al menos este año se lo lleva uno del Big Four para callar algunas voces críticas.
España sólo ha ganado en dos ocasiones el festival de Eurovisión y una de ellas lo hizo de rebote en un empate. En los últimos años la polémica venía servida por el triunfo de los países del este lo que hacía pensar que estos países se votaban entre sí. Sin embargo, grandes canciones han surgido de esta competición que tiene más de medio siglo, desde la mejor canción de la historia del mismo con "Waterloo" de Abba, a las más recientes como "My number one" de Helena Paparizou (Grecia) o "Every where that I can" de Sertab Erener (Turquía). Un evento que cuenta con una maldición, y es que pocas veces un artista aclamado se presenta porque puede perjudicar a su carrera y salir debilitado en su incursión. Otro año que pasa y no nos comemos un "rosco", habrá que poner esperanzas en el año que viene y mantener a Karmele lejos de los escenarios a menos que presente un dueto con John Cobra.
Una de las mejores canciones de la historia del festival, se encuentra entre las cinco primeras.