Cibeles Fashion Week: La música también a la moda.

Cibeles para todos, "Madrid fashion week"para el mundo. La pasarela más importante de nuestro país regresa una nueva edición para mostrar las propuestas de los diseñadores de la próxima temporada otoño/invierno. Una ocasión para llamar la atención del público y retomar viejas polémicas sobre los modelos que desfilan. Vuelven a lucirse las mejores creaciones de los diseñadores, y se deja ver entre las primeras filas el famoseo nacional, e incluso a veces internacional. Una vez más, Madrid acoge la moda y hace gala de su conocida fama como "la ciudad abierta".

Un evento de esta categoría es un escaparate que no sólo se ciñe a la moda. La música también está presente además de para acompañar los acompasados pasos de las modelos. Los cantantes quieren conocer las tendencias y mostrar que ellos también posan actuales en las portadas de sus trabajos. Se han dejado ver personajes como Chenoa, Raquel Del Rosario, Amaral o las chicas de Dover que se atrevieron a cantar y dar el cante. Cada artista tiene su diseñador fetiche y quieren en todo momento apoyar al que les vestirá en la alfombra roja de los eventos musicales. El panorama nacional estuvo bastante representado, lo que no se puede decir del extranjero.


Puede que nuestros artistas debieran captar los aires de la pasarela Cibeles y enseñarnos sus propuestas para el nuevo año. Chenoa aprovechó el desfile de Adolfo Dominguez para hablar del talento del diseñador, y dar a conocer su ajetreada agenda de trabajo. Raquel del Rosario se pronunciaba sobre la gira que comienza de El sueño de Morfeo en acústico. También se dejo ver la muy solicitada Edurne, que se debate entre los musicales y los bailes en "Mira Quién Baila". Por esta pasarela no sólo desfila ropa, también proyectos que en no mucho tiempo nos deleitará nuestro óído.


Lo que esta claro, lejos de los proyectos de los asistentes, es que Madrid Fashion Week es un imán para los flashes, y cada vez pisa con más fuerza en el panorama internacional de la moda. Durante una semana la ciudad se permite decir: ¡Antes muerta que sencilla!